Aunque el título del presente post ya es repetido y nos puede recordar la primera frase del popular vals de Juan Mosto "Que importa", que fuera popularizado por Lucha Reyes y que usualmente es usado cada vez que se habla de fútbol (otro de los grandes temas de fracaso nacional), no se preocupen, no hablaré ni de fútbol o amores no correspondidos. Por el contrario les hablaré de tecnología y como el deseo o las buenas intenciones no son suficientes para resolver problemas.
En este blog hace mucho que no tocaba el tema de la OLPC, durante ciertos momentos del 2007 y del 2008, este era un tema recurrente porque se dicutía sobre la implementación del proyecto y los tremendos beneficios que traería a la educación peruana, aquellos que hayan seguido este blog recordarán que siempre fui bastante crítico del proyecto (todos los post relacionados al OLPC), en la forma y fines que fue presentado.
Bueno luego de 3 años de experimentación/implementación lo único que ha quedado claro es que, el famoso programa de "Una laptop por niño", se terminó convirtiendo en siete niños por latop (según OLPCNews) y con reportes de que luego de dos años de uso un porcentaje significativo de las laptops no están operativas por falta de mantenimiento o repuestos, pareciera poco racional que el gobierno siga insistiendo en el proyecto y ahora planee comprar más XO-1.5 para distribuirlas en las escuelas secundarias, según informa la agencia de noticias oficial Andina.
Aunque muchos no lo puedan creer (es más yo no lo puedo creer), el Perú se convertirá en el líder mundial en cuanto a adquisición y despliegue de OLPC, ya se poseeían 260,000 laptops, pero se han adquirido 300,000 laptops más con lo cual se supera las 400,000 que Uruguay (el actual líder mundial) ha desplegado. La pregunta obvia es si hay algún estudio del Ministerio de Educación que demuestre que hay una mejora luego de dos años con el proyecto para poder evaluar la conveniencia o no de seguir con el mismo, y la respuesta obvia es que no lo hay.
El Perú, al igual que la mayoría de países latinoamericanos, es un país de fé. El Perú tiene fé que comprando las laptops, todos los problemas estructurales del sistema educativo peruano como un profesorado no entrenado apropiadamente, altamente politizado, carente de motivación y una infraestructura educativa muy mal mantenida y llena de carencias, desapareceran gracias a las maquinitas verdes. Al parecer como los problemas no han desaparecido, se concluyó que la razón debe ser porque han faltado más laptops y ahora hay que incluir a secundaria, ciertamente un acto de fé que quisiera compartir; eso y también el optimismo que veo en muchos de mis compatriotas tienen cada vez que comienza una rueda clasificatoria mundialista, que sin ser Nostradamus o el pulpo Paul todos sabemos como terminará para nosotros.
Estamos dilapidando el poco dinero que el estado ha podido ahorrar en estos últimos años de bonanza minera en proyectos que difícilmente podrán cambiar la situación del promedio de la población, simplemente porque no es cuestión de voluntad política, ni de gasto social. Es cuestión de sentido común y corregir el rumbo si se detecta que algo está mal, lamentablemente en una sociedad en la cuál se le dá tanto peso a la fé, un error no es visto como una oportunidad de aprender, sino por el contrario la prueba de que todo lo que hiciste, haces y podrías hacer está mal. Es por ello que un fracaso más no importa, ya que al final todo es cuestión de fé.