El ciclo natural de la vida es nacer, crecer, reproducirse y morir. Esto es cierto no sólo para los organismos vivos sino también para las empresas, todas incian como un desconocido pero prometedor emprendimiento y luego de período de rápido crecimiento donde todos predicen que tomará el mundo por asalto y sin dejar presioneros, pasa de ser idolatrada a ser temida, para luego iniciar un lento camino de desvanecimiento en las arenas del tiempo. Aunque a diferencia de los seres humanos muchas veces las empresas que han cumplido su ciclo no mueren (quiebran), sino que permanecen en un estado en el cual no crecen, no llaman la atención de los medios y sólo producen unos ingresos mensuales fijos por décadas manejando el tema de costes.
IBM fue el primero de los gigantes del TIC en entrar en este prolongado ocaso, donde pasó de ser el referente en el mundo de las TIC a una vieja empresa que mantiene su cuota de mercado. Luego llegó el turno de Microsoft de pasar por este mismo ciclo, finalmente Google comienza a dar muestras de agotamiento y lo más importante su archirival Facebook le ha ganado la partida en el mercado del futuro, la publicidad contextualizada en redes sociales.
Google ha tratado de reaccionar ante el avance de su rival, pero lo está haciendo tarde y mal. La pelea por exigir reciprocidad con la información de la lista de contactos que comparte con otros proveedores de servicios, y que Facebook usa en su favor sin permitir a Google acceder a los contactos que colecta Facebook desde otras fuentes, de la cual podemos encontrar una detallada explicación en TechCrunch. O la tardía reacción de aumentar el 10% al salario del próximo año a sus empleados para mantenerlos, digo tardía ya que a lo largo de los últimos meses Google ha estado perdiendo ingenieros claves para el futuro de la empresa de manera lenta pero contínua.
El miercoles pasado (10 de noviembre) en PC Magazine, John C. Dvorak publicó un artículo titulado "La inevitable ruina de Google", donde básicamente lo que nos quiere dar a entender es que en Google, ha muerto la creatividad y sólo están pensando en mejoras incrementales, donde las ideas no vienen de ver más alla de lo que otros ven, sino de voltear a ver donde está la competencia para tratar de ofrecer lo mismo y desesperadamente mantener la posición de líder. Esto es lo que le pasó a IBM y Microsoft, ahora Google está experimentando lo mismo.
Pero lo nuevo es que cada vez los ciclos se hacen más cortos, el reinado de IBM duró casi cuatenta años, Microsoft apenas tuvo 20 años de esplendor y ahora Google apenas ha llegado a la decena. Está condenado el próximo líder a sólo reinar por apenas unos pocos años o ya no veremos otro claro líder en el sector TIC y todo será una batalla por comoditizar las TIC. En este sentido Facebook parece que ha dado un paso adeltante y probablemente lance el próximo lunes (15 de noviembre) el famoso Proyecto Titan, también conocido como el Gmail killer, según he leído en TechCrunch. Una dirección de correo más que se sumará a la lista de e-mails que los usuarios han ido colectando a su paso por los diferentes portales y servicios web que han usado a lo largo de su cybervida.