En el web site del períodico The New Zeland Herald, se menciona una estadística proporcionada por una empresa de Nueva Zelanda experta en seguridad informática llamada Voco, que afirma que el 25% del tiempo on-line durante una jornada laboral es usado para asuntos personales. Es decir durante 2 horas al día, los trabajadores de oficina que tienen acceso a Internet realizan sus asuntos personales usando la computadora y la conexión a Internet de la oficina, esto es posible en parte porque no hay forma de que los jefes puedan controlar efectivamente que está haciendo cada empleado. ¿Qué son asuntos personales?, el messenger, su cuenta de e-mail privada, su blog, suben y bajan videos y fotorgrafías, etc.
Bueno, si eso ocurre en países desarrollados como Nueva Zelanda, mi pregunta es que ocurre en países menos desarrollados y donde no existe el interés de hacer este tipo de estadísticas. Dado que en latinoamérica hemos tenido una larga tradición de burocracia estatal ineficiente y en muchos casos parasitaria, la tan llamada modernización del estado o el popular e-Gobierno, no terminará siendo mas bien una nueva forma de proveer entretenimiento a los empleados del estado. Como saber si las computadoras instaladas en un juzgado para que las secretarias puedan procesar los casos más rápidamente, no terminan siendo usadas para que dichas secretarias busquen novio on-line.
Esta es sólo una pequeña reflexión sobre el tema que ha traído a discusión el The New Zeland Herald. No pretendo decir que todos los burócratas son ociosos, ni que la modernización de la administración pública sea una mala idea, pero creo que una mayor transparencia en métricas que muestren una mejora en la productividad de las entidades del estado, luego de haber invertido millones de dólares en tecnologías de la información para los organismos estatales se impone. Es fácil saber cuando se ha usado un vehículo de uso oficial en asuntos personales (salir a pasear con la novia por ejemplo), además se pueden presentar pruebas (fotos, videos), pero es mucho más difícil probar que un empleado público de bajo nivel en la escala ha usado su computadora para hacer actividades personales, en lugar de su trabajo.
Por qué no pido que se haga lo mismo con las empresas privadas, simple. Porque en una empresa privada el que esta perdiendo eficiencia es el empresario, y el que se perjudica es él, y justamente por eso es en las empresas privadas es en donde hay una mayor conciencia del problema y se trata de evitar. Para el caso del estado, los que perdemos somos todos los contribuyentes, que a la vez somos los que pagamos los sueldos de los empleados públicos, y además hacemos uso de los servicios de buena o mala calidad que nos proveen.