Bueno, el día de ayer todos celebraron, la razón es que iniciamos el año con una espectacular subida de los commodities y el mercado de valores. Sin embargo, ya para el día de hoy la euforia que tenía Wall St. parece haber desaparecido y es que es muy difícil mantener el optimismo en medio de tantas cosas que pueden salir realmente mal durante el 2010. Tal vez la primera de ellas, sea el problema con las propiedades inmobiliarias comerciales, el día de hoy en Bloomberg News podemos leer bajo el título "Baño de sange de ‘Silicon Valley’ deja edificios enteros vacíos". No hay duda de que uno de los sectores que mejor comportamiento presentó durante el 2009 fue el sector tecnológico, sin embargo aún así es claro que la contracción continúa y probablemente continuara por algunos años más.
Pero como es que las propiedades inmobiliarias comerciales pueden presentar una amenaza a todo el sistema financiero, pues la explicación nos la da Paddy Hirsch, editor senior de Marketplace, en el siguiente video:
La explicación es sencilla, en los años del boom todos pensaban que los buenos tiempos durarian para siempre y muchos grandes proyectos de construcción se iniciaron consiguiendo el financiamiento de los bancos regionales, ahora que la economía sigue contrayendose ya nadie alquila nuevos espacios con lo que las nuevas construcciones no pueden cobrar alquileres, que es la única fuente de ingresos de estas grandes construcciones razon por la cual no pueden pagar los intereses de los prestamos hechos para su construcción. Es por ello que es tan frecuente que el FDIC (el organismo federal que garantiza los depósitos en los bancos) cierre bancos casi todas las semanas. La lista completa de los bancos cerrados puede ser vista aquí. Nos podremos dar cuenta de la magnitud del problema si consideramos que en el 2009 140 bancos fueron cerrados, lo cual es el 70% de todos los bancos cerrados por la FDIC desde el 2001.
Por qué nadie habla del problema públicamente a pesar de lo grande y potencialmente peligroso que este puede ser. Pues justamente por la misma razón, temen que una oleada de ahorristas en pánico termine quebrando el endeble sistema financiero. De la misma forma que tampoco se habla públicamente del incremento de los default en tarjetas de crédito y la completamente irresponsable política fiscal que ya ha puesto la deuda pública estadounidense por encima del 85% del PBI, sin que esto logre el objetivo de reiniciar el ciclo económico de crecimiento.
Se que había dicho que me enfocaría en temas más técnicos, pero no podía dejar de comentar sobre este hecho. Espero que ayude a muchos que piensan que lo peor ha pasado a reconsiderar sus estrategias de largo plazo.